Centro Voz en Movimiento
Ofrecemos un espacio diferente para que puedas conectar tu voz y tu cuerpo con tu instinto y tu emoción.
Desarrollamos una progresión de ejercicios de voz y movimiento que te ayudarán a liberar tu voz natural de manera orgánica y placentera, potenciando tu expresividad a la hora de comunicarte.
Te ayudamos a lograr más libertad, fortaleza y claridad en tu voz.
METODOLOGÍA LINKLATER
“Todo el mundo posee una voz capaz de expresar, por medio de un registro natural de 2 a 4 octavas, toda la paleta de sus emociones, la complejidad de su estado de ánimo y la sutileza de sus pensamientos.”
Creada por Kristin Linklater, profesora emérita de la Universidad de Columbia y maestra de actores como Donald Sutherland, Sigourney Weaver, Bill Murray y Alan Rickman. Esta metodología ofrece una progresión de ejercicios para actores profesionales, estudiantes de arte dramático, cantantes, locutores y otros profesionales de la voz, así como para cualquier persona con interés por la expresión vocal. Se fundamenta en la exploración y transformación de obstáculos psico-físicos que inhiben la voz, para entrar en contacto directo con el deseo de comunicar, en colaboración con el intelecto.
La metodología Linklater está diseñada para liberar la voz natural y desarrollar una técnica vocal al servicio de la expresión, por medio de esta progresión:
- Conciencia corporal y relajación activa
- Liberar la respiración
- Facilitar la vibración de la voz en el cuerpo
- Relajar garganta, mandíbula y lengua
- Flexibilizar velo del paladar
- Fortalecer la voz a través de los resonadores y la potencia de la respiración
- Jugar para ampliar el registro vocal;psico
- Agilizar la articulación de la palabra, y su conexión profunda y verdadera con nuestro paisaje interior.
Todos los ejercicios de la metodología Linklater tienen relevancia tanto para la voz hablada como cantada.
EDUCACIÓN SOMÁTICA DEL MOVIMIENTO
“La somática es el estudio del ser desde la perspectiva de la propia experiencia vivida, acogiendo las dimensiones del cuerpo la psique y el espíritu”.
En los años 70 Thomas Hanna acuña este término para englobar en un campo educativo y de investigación todas las técnicas corporales y vocales que promueven la integración del cuerpo y la mente incluyendo la experiencia subjetiva de la persona. El concepto de “soma” (vida, consciente, corporal) postula que ni el cuerpo ni la mente están separados uno del otro y que ambos son parte de un proceso vivo.
La Educación Somática del Movimiento es un campo educativo, terapéutico y de investigación que, centrándose en el cuerpo, utiliza diversos enfoques que promueven la integración , transformación y sensibilización para facilitar un mayor bienestar psico-físico.
Body-Mind Centering ® , Integrative Bodywork and Movement Therapy o la Disciplina de Movimiento Auténtico son metodologías para la Educación Somática del Movimiento.
LA MIRADA GESTÁLTICA
«No hay poesía sin Dionisio. El dios de la entrega que empieza por el placer. No consiste en ser una persona domesticada. Consiste en quitarse los condicionamientos para que culmine un ser humano. La persona que encarna lo divino encarna lo creativo. ¿Qué será eso de la creatividad?»
La mirada gestáltica permite habitar el aquí y el ahora con conciencia física y emocional. Cultiva la presencia a través de una escucha hacia uno mismo y los demás. Ofrece una manera de entregarse al presente con apertura a lo que hay, con permiso para atravesar paisajes, emociones y expresiones del ser. Permite desarrollar el testigo interno y mirarse con más compasión y amor. En esencia, es una forma de vivir plena, libre y abierta, con aceptación de lo que uno es y con responsabilidad personal, apreciando lo obvio, lo que ES.
Dice Fritz Perls «El neurótico es una persona que no ve lo obvio». Y esto es lo que tratamos de hacer que la persona pueda quedarse frente a frente con su manera particular de evitar el tener oídos, músculos, autoridad, seguridad en sí misma. Viendo toda la energía que se desperdicia.
«El darse cuenta per se» puede ser curativo. Porque uno se da cuenta de esta autoregulación organísmica, uno puede permitir que el organismo se haga cargo sin interferir, sin interrumpir; podemos fiarnos de la sabiduría del organismo. De no ser así andaríamos en nuestro mundo de fantasía que se apodera de nuestra energía y fuerza vital y nos deja con poca energía para estar en contacto con el mundo. Necesitamos despertar los sentidos. La fuerza vital, energiza mediante el sentir, el escuchar, el escudriñar, describiendo el mundo.
La gran diferencia de la terapia Gestalt con otras terapias es que no analiza, integra. La polaridad entre cuerpo y mente, por poner un ejemplo, nos lleva a identificarnos con la mente y dejamos fuera al organismo. Y lo que queremos es que el cuerpo informe a la mente. Y ahí integramos. «Usamos el cuerpo en vez de ser cuerpo» decía Fritz Perls.
ENTRENAMIENTO AUDITIVO
«Los sonidos musicales producen un efecto sobre la percepción del tiempo. Ya seamos ejecutantes u oyentes, el tiempo que dura la música adquiere características propias, distintas de las del tiempo cotidiano: da la sensación de acelerar o frenar, parece interminable o muy breve, comunica ansiedad, placidez, curiosidad o vértigo.»
Cantar implica una escucha activa. Al entrenar el oído acostumbramos al cerebro a responder de manera musical a un impulso musical. La audiopercepción nos enseña a reconocer las distancias entre las notas, y la relación entre estas, y entrena y desarrolla nuestra relación con el ritmo. También desarrolla nuestra memoria melódica y rítmica, lo que nos permite recordar melodías y ritmos de una manera orgánica e integrada en el cuerpo. La afinación se vuelve más instintiva y más fácil, facilitando la competencia inconsciente al cantar.
La música combina los sonidos para construir formas en el tiempo. Para cantar, hacemos un triple trabajo: percibimos el momento presente, recordamos y organizamos lo que pasó y miramos al futuro. La percepción de la música es sobre todo un trabajo de memoria y de imaginación. Recordamos y oímos lo que acabamos de cantar, anticipamos e imaginamos lo que vamos a cantar. Es por eso que cantar implica una escucha activa. Es un trabajo de memoria, escucha e imaginación.
Para ello necesitamos entender los componentes de la música: ritmo, melodía, intervalos (espacios entre notas) y acordes (varias notas que suenan juntas). Con el entrenamiento auditivo desglosamos esos elementos y a la vez los oímos como un todo, para después cantarlos. Reconocemos y cantamos los ritmos, las melodías, los intervalos y las armonías, y así no se quedan en simple teoría. Este acercamiento activo y práctico a la audiopercepción nos lleva a encarnar la música, integrándola en la voz y el cuerpo.